Una de nuestras propuestas más arriesgadas; decidimos darle rienda suelta a nuestra locura y jugar con la imaginación y la fantasía, plasmando en lo que nosotros llamamos, El Templo Del Can, todo aquello que nos parecía que sería imposible de ver en un restaurante convencional frente al mar, esto lo logramos de la mano de varios artistas Españoles y Latinos. Un lugar con muchos detalles y muchas historias que contar.